Después del listado de materiales y de la cifra millonaria que el gobierno invertirá en la construcción de un nuevo quincho, la remodelación de la cocina y la heladera de Olivos, tomó estado público la millonaria compra de fiambres que el gobierno realiza semestralmente. Según las cifras oficiales, o las ratas están comiendo demasiado queso o alguien se queda con un vuelto.
Horas atrás el Gobierno debió salir a aclarar sobre la compra de alimentos para realizar “picadas” por más de 24 millones de pesos y aseguró, como siempre hace ante cada acto de corrupción que sale a la luz, que se trata de información “falsa y distorsionada”. Sin embargo la documentación oficial confirma que se gastan 24 millones de pesos por semestre, es decir 48 millones al año en fiambres y quesos, de los cuales sólo una mínima parte llega a Casa Rosada.
Luego de la denuncia, a través de un comunicado, la Secretaría General de la Presidencia intentó argumentar: “Ante la difusión de información falsa y distorsionada sobre gastos en la compra de alimentos para la Residencia Presidencial de Olivos y la Casa de Gobierno, aclaramos que los productos que se mencionan en la Licitación Pública son parte de los ingredientes que se utilizan para el consumo de personal administrativo, periodistas y fuerzas de seguridad. Además, la elaboración de alimentos en las distintas dependencias de Presidencia también está destinado a actividades protocolares y diplomáticas”.
EL QUINCHO DE ALBERTO
La quinta ya cuenta con un quincho presidencial majestuoso, otro secundario, varias cocinas y diversas estructuras de utilidad gastronómica. Existen decenas de espacios diseñados para juntarse a comer, al punto que nadie sabe con certeza cuántas parrillas hay en el predio, lo que sí está claro es que son muchísimas más de las necesarias. Sin embargo, la Quinta, al igual que la Argentina de Alberto y Cristina, prospera, y precisamente por eso el gobierno prioriza la construcción de un nuevo quincho.
De acuerdo al pliego de materiales solicitados, la estructura requiere maderas para cubrir un techo completo de 71 m2, ladrillos para 140 m2 de pared, cuatro toneladas de cemento, tres puertas exteriores y tres ventanas de cedro, instalación eléctrica completa, entre otros tantos elementos detallados, con los cuales alcanzaría para mejorar el deficiente estado edilicio de varias escuelas.
Dos mesadas de granito acompañarán la parrilla, una de ellas tendrá bacha, grifería y anafe. También se encargó un brasero leñero uruguayo. La estructura contará con dos baños completos.
Hasta el momento el gobierno prefiere no hablar del tema y se mantiene como secreto de estado el costo final del quincho. Antonio Zucco, vocero de la Secretaría General de Presidencia, al ser consultado sobre el tema contestó de forma evasiva: “aparentemente se trata de requerimientos para tareas de mantenimiento y refacción, eso es todo, no puedo precisar más detalles”, concluyó.