Entre 5 y 6 millones de personas salieron a las calles el martes para agradecerle a la Selección Argentina la obtención de la tercera Copa del Mundo. Lionel Messi y la Scaloneta tuvieron que terminar su caravana de celebración este con un sobrevuelo en helicóptero sobre una Buenos Aires desbordante de la manifestación más grande que se haya visto en el país.
Al cabo de cinco horas de recorrido en un autobús descapotable que se movía prácticamente a paso de hombre, los jugadores renunciaron a proseguir por tierra su trayecto que había comenzado en el predio de la Asociación de Fútbol Argentino (AFA) en Ezeiza.
«Los Campeones del Mundo están sobrevolando todo el recorrido en helicópteros porque se hizo imposible seguir por tierra ante la explosión de alegría popular. Sigamos celebrando en paz y mostrándoles nuestro amor y admiración», anunció Gabriela Cerruti, portavoz de la Presidencia, en su cuenta Twitter. El presidente de la Nación, Alberto Fernández, dio su propio mensaje luego y aseguró que este «diciembre distinto» quedará «para siempre en nuestros corazones».
Tras el regreso al predio de la AFA, los deportistas saludaron a la gente desde sus redes sociales y partieron a sus hogares. Messi, Dybala y Di María fueron vistos arribando a Rosario.